La defensa de los derechos de las minorías tuvo su origen a finales del siglo XVII, ya que desde la época colonial los grupos étnicos eran perseguidos, desaparecidos y asesinados, sin importar el daño social que generaba este tipo de actos. Ante esta situación, fue necesario establecer los derechos de las minorías, con el fin de proteger los intereses de grupos sociales pequeños (étnicos, religiosos) que no tenían ningún tipo de representación ante el gobierno nacional. En la actualidad, aún se presentan persecuciones y asesinatos en contra de estos grupos en toda Colombia.