Históricamente, el arte ha representado una fuente de influencia social y cultural innegable. Como parte de éste, la literatura no se ha quedado atrás a la hora de hacer consonancia entre la realidad y las manifestaciones artísticas de acuerdo con los ideales de cada época. En este sentido se han desarrollado diversas tendencias conocidas con el nombre de escuelas literarias, que no sólo responden a los ideales de belleza del momento, sino que también dan a conocer un punto de vista creativo sobre escenarios como el medio ambiente, el contexto ideológico, político, social y cultural.

Dentro de dichas escuelas literarias, se han desarrollado las figuras literarias, unas con más predominancia que otras, según los intereses de la escuela, con el fin de hacer belleza con el lenguaje y dar vida a estilos inconfundibles. Por ejemplo, en el caso de las vanguardias literarias, se hace belleza y lenguaje de una forma totalmente diferente que rompe con la estructura y superestructura textual conocida hasta el momento.